Desde otras ciudades =================================== Por: Alia Lira-Hartmann Anuradhapura, la urbe sagrada budista con el árbol más longevo del mundo La isla de Sri Lanka, que a lo largo de su historia se encontró bajo el dominio de diferentes países, fue también antigua colonia inglesa desde 1802 hasta 1948, cuando adquirió su independencia. Durante el siglo pasado se le denominó Ceilán, pero el nuevo nombre de este país se hizo popular mundialmente por un tipo particular de té negro, cuyo cultivo y exportación es uno de los pilares de su economía. La forma geográfica de la isla, que se encuentra en la parte sureste de India, en el Océano Índico, hizo que en el continente asiático se llegara a conocer con el nombre de `la lágrima de la India'. Al norte del país se encuentra la capital Anuradhapura, cuya antigüedad está documentada alrededor de 2500 años. Incontables ruinas arqueológicas inundan los alrededores de esta ciudad que pareciera perderse entre la espesa jungla. La urbe fue construida alrededor del Sri Maha Bodhi, que de acuerdo con la tradición es un retoño del árbol bodhi, bajo cuyas ramas Siddharta Gautama, conocido como Buda Gautama o el Buda –no fue el primero ni el último– y bajo cuyas enseñanzas se fundó el budismo, alcanzó la iluminación, el despertar o el nirvana, el cual es un concepto filosófico y religioso que alude a una experiencia de lo divino, de esclarecimiento interior de paz, amor o felicidad. Según la leyenda, Buda logró la iluminación espiritual mientras meditaba debajo un árbol llamado Bodhi, que se encontraba en la localidad de Bodh Gaya, en India. Desde entonces el árbol se convirtió en un lugar de peregrinación desde antes incluso de la muerte de Buda, alrededor de 400 años a.C. El árbol original en India ya no existe, pero un retoño del aquel fue plantado en Anuradhapura en el año 288 a.C, lo cual lo convierte en el más antiguo del mundo con fecha específica de siembra. En Sri Lanka existe incluso un ministerio de administración gubernamental dedicado de forma exclusiva al cuidado y preservación del árbol sagrado. El nombre conocido popularmente es el bodhi, cuya traducción es el árbol de la iluminación, incluso el nombre científico en latín alude al contexto espiritual alrededor de este objeto de culto: Ficus Religiosa. En las inmediaciones existe también un santuario dedicado al momento de la iluminación de Buda bajo las ramas de este árbol. Se cuentan por millones los peregrinos y turistas que visitan la zona en la que se halla la planta sagrada ante la cual está prohibido tomar fotografías. Alia Lira-Hartmann, corresponsal ## Vía: https://www.jornada.com.mx/2019/12/29/opinion/023o1cap