Los orígenes de Tilde.Club El tilde.club fue armado en 2014 por Paul Ford. Se inspiró originalmente en un post de la rockera Stevie Nicks (la rubia cantante de Freetwood Mac). La intérprete de Seventeen tiene una veta de bloguera, siempre le gustó escribir. Y el día de acción de gracias de 2004 se puso a teclear en su Pentium 3 común y corriente un posteo a su blog. En este agradecía a las fuerzas armadas de los Estados Unidos, por entonces en plena campaña en la que declamaban "combate al terrorismo". Entre otras cosas Nicks ponía: Muchas veces en mi vida, cuando estaba triste o insegura de lo que estaba haciendo, mi mamá me decía "tenés una misión Stevie, siempre la tuviste~ es tu destino". Esto que nos sucede se parece a nuestro destino, lo suyo y lo mío. Esto que está sucediéndonos ahora. Lo digo de nuevo, deseo que el ángel de la guarda los acompañe~ les deseo que estén seguros~ Paul leyó esto y le llamó la atención el uso que hacía Stevie Nicks de los tilde. Se lo comentó a su esposa Moureen. "Ah, eso es algo de los de la Costa Oeste", dijo Mo, Californiana. "Cuando escribíamos a máquina en la secundaria poníamos tilde en lugar de usar guión o guión bajo. Nos resultaba más parecido a la escritura a mano". Paul compartió el factoide en una red de microblogging. Y un compañero le respondió: "Los tildes también se usaban antes de los nombres de usuario en los sistemas de tiempo compartido". ¿Cómo? "Bueno, en los tiempos de la primera internet a principios de la década de 1990, si eras nerd y querías armarte una página web, podías conectarte a algún servidor y te daban una dirección http://pirulo.net/~fulano. Y metías una página web en esa dirección. Cada página web se desprendía de esa dirección "tilde"... es lo que precedió al blogueo. En esas máquinas el ~ significaba lo mismo que la @ de Twitter. Significa "de tal persona". Tras esta explicación, Paul publicó, "Si, también acabo de registrar http://tilde.club y estaré dando cuenta shell a cualquiera que me pida (sic). Una cuenta shell te da acceso al uso de una computadora. Cuando ingresas, usas un prograrma "intérprete" al que le puedes escribir órdenes. Estos son los comandos que los hackers se las pasan tecleando en las películas. Desde esta línea de comandos podés escribir cosas y crear páginas web. Si bien hoy podría parecer retro y hasta curioso, hay mucha potencia y valor intrínseco a este enjundio. Varios amigos le respondieron: "¡Seguro! Si sos serio...". Como ya era tarde y contaba con dos artículos terminados para Businessweek, Ford pensó que era hora de irse a dormir. Nadie haría caso de su oferta. Pero como los chicos ya estaban en la cama, no tardó mucho tiempo configurar una instancia de cómputo en la nube. La armó con el servicio más pequeño y barato y de Amazon. La máquina corría un sistema operativo similar a UNIX y se encontraba en algún lugar de Virginia, Estados Unidos. Se logeó, creó unas pocas cuentas de usuario, e instaló un servidor web. Y se fue a dormir. Al despertar, había más de 100 tipos pidiendo cuentas de acceso al shell. Claro, a la gente le gustan las cosas gratis. Respondió todos los correos electrónico y creó las 100 cuentas. El club en acción La gente comenzó a loguearse y empezaron a chatear en vivo, enviar arte ASCII de dragones a todos los que estaban en el sistema. Luego se mandaron a los editores de texto y comenzaron a crear páginas web, directamente ahí en el servidor, tal como Paul había querido. Muchas de las páginas web eran retro a propósito, con una apariencia noventosa; otras eran meditaciones de la significancia del tilde.club. Algunas páginas contenían historias, algunas se producían con código de programación. Algunos escribían código para hacer orden del caos en expansión. Con el correr de los años, la comunidad se expandió de forma inconexa pero a la vez ferviente y despreocupada. Tilde.club es una computadora con Unix común y corriente anclada a la internet. No tiene apuro que te conectes, no tiene plan de negocios. No se compite contra nadie. Es una computadora como cualquier otra. Y como todo producto de origen dudoso, se autoproclama "con único fines de entretenimiento". Carece de características especiales más allá que esperar seres decentes y muy básicamente humanos, algo que podría parecer atípico en la internet. En un momento, Paul pensó: ¿Y qué sucedería si este chiste que hice, a través de alguna alquimia rara, se terminase convirtiendo en un sistema gigante, descentralizado y seguro de servidores Unix distribuido en hogares, escuelas, y a lo largo de varias nubes? ¿La gente podría utilizar estas máquinas para enseñar y aprender? ¿Qué pasaría si construimos algunas herramientas encima del Unix, de modo que tilde.club pueda usarse para suplantar, mínimamente aunque sea, a las redes sociales comerciales de hoy en día? Y luego el servidor se colgó. Un buen recordatorio, que Tilde.club es un sistema Unix barato, sin modificaciones, y anclado a Internet.